Con el 25 % del personal contagiado en los últimos días sumado a la falta de personal por los contactos estrechos y aislamientos, los gastronómicos están en estado de alerta por el registro de cierre de locales y restricciones en los horarios.
Los dueños de comercios lanzaron la advertencia que, de extenderse la escalada de casos positivos, se frenaría la reactivación del sector. Esto es por el gran número de contagios debido a la variante Ómicron y el número récord que día a día se supera.
Uno de los rubros más golpeados por la pandemia del Covid 19 es sin dudas la gastronomía pero ante un diciembre con pocos casos muchos comerciantes se ilusionaron con tener una buena temporada de verano entre otras mejoras por la relajación de las restricciones impuestas por las autoridades. Sin embargo, ante el avance de casos, restaurantes y bares se ven obligados a reducir los horarios de atención, restringir el espacio en sus salones y hasta cerrar sus puertas temporalmente por la falta de personal, que se encuentra con Coronavirus o aislado debido a contactos estrechos.
Según los datos de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina, FEHGRA, que agrupa a más de 50.000 establecimientos a través de sus filiales en todo el país, el 25% de los trabajadores están empleados en el rubro se encuentra fuera de actividad.
Según FEHGRA, en este momento del año, los lugares más afectados son los centros turísticos, especialmente la Costa Atlántica y, con especial particularidad, en Mar del Plata.
En tanto, en la Ciudad de Buenos Aires varias cadenas gastronómicas debieron tomar medidas al respecto. Uno de los Café de renombre está funcionando con un 16% menos de su dotación, además, llegó a tener un 25% inactivo. Esta información implica una baja de alrededor de 40 empleados. La semana pasada, dos de sus locales funcionaron a medio turno: el de Talcahuano 948 y el de Avenida de Mayo y Chacabuco.
Por esta razón, Marcelo Salas, gerente de la empresa de café, argumentó que “el panorama es desparejo y dinámico, cambia hora a hora. Trabajamos como podemos. Tenemos problemas con los proveedores logísticos. El Gobierno tiene que habilitar que los comercios podamos hacer los testeos. Necesitamos kits gratuitos para hacer las pruebas nosotros”.
A su vez, personal jerárquico de una de las cadenas de comida rápida más conocidas, admiten que están al borde de cerrar locales temporalmente, por un 20% menos de plantel operativo, aseguran que “estamos muy apretados, tratando de sostener el horario de atención. Desde el punto de vista económico, también es un problema, ya que debemos pagar la ausencia laboral de los casos positivos y de los contactos estrechos, y las horas extras de quienes los están cubriendo”.
Asimismo, por esta situación según informa el Grupo Gestión, se triplicó la búsqueda de staff temporal. Pero a la vez, Gustavo Fernández Capiet, secretario de FEHGRA, comenta que cubrir los faltantes que surgen abruptamente es una situación delicada: “No es fácil encontrar reemplazos rápidamente. Se dificulta contratar empleados de forma temporal porque el mercado laboral está reducido por la cantidad de gente contagiada. Además, hay puestos que son más sensibles que otros. No es lo mismo si se enferma un cocinero que un bachero”.
Aunque también explica que la situación actual es diferente al momento más crítico de la cuarentena: “Estamos lejos de esa situación. El problema es la mochila de la deuda que arrastramos. Un empresario me comentó que por el cierre de su local perdió $ 400.000 por día. El interrogante es si esta situación se sostendrá o empezará a ceder. Es incierto cuándo se normalizará”.
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