El fenómeno Messi crece con la llegada del Campus de Barcelona al país .La presión de los padres influye negativamente en lo que debería ser una elección natural.
La llegada del Campus de Barcelona al país trajo aparejado mucho stress a los jugadores de futbol infantil. La insistencia de los padres por lograr tener al nuevo Messi como hijo hace que los niños no disfruten libremente del futbol y lo vean mas como un espacio de competencia que como un lugar de diversión.Las canchas de fútbol infantiles se convirtieron es un lugar más para padres ambiciosos que para niños deportivos. Es que todos sueñan con un Messi en la familia.
Sin embargo los psicólogos se muestran preocupados ante esta situación dado que tanta adrenalina de competencia pude ocasionar muchos problemas en los niños como doble stres, sensación de frustración y rebeldía.
Solo hace falta observar que de 10 niños 8 tienen la camiseta del 10 argentino.
Los profesionales entrenadores se muestran igualmente preocupados ante esta situación dado que el objetivo principal del fútbol es la camarería y la diversión sana .Sin embargo en los últimos meses degeneró en un espacio de presiones inatajables.
Un total de 45 mil niños entrenan en la Ciudad de Buenos Aires en las diferentes escuelitas de futbol de ligas infantiles oficiales. La edad varía entre los 7 y 17 años de edad.
Todos tienen los mismos sueños: debutar en primera división y convertirse en el próximo Messi del país.
Si bien es verdad que el crack argentino es un orgullo y ejemplo a seguir para muchos, también es cierto que intentar imitarlo e igualarlo a cualquier precio tiene sus riesgos.
Los entrenadores infantiles aseguran que la presión de los niños proviene de sus hogares.
Según Esteban Colombo, sicoanalista deportivo “Es una exigencia desmedida, en donde el padre suele proyectar y depositar en el niño sus propias frustraciones”.
Es tanta la presión que sufren los niños que comienzan a tergiversarse los verdaderos objetivos del deporte. Tal es la presión que sienten los niños en su rendimiento que la Asociación de Escuelitas de Fútbol Infantil (AEFI) creó un código de conducta para padres y eliminó la tabla de posiciones.
Los días 18 a 22 de julio el Campus Barcelona visitará el país con el fin de buscar al nuevo Messi.
Participarán total de 320 chicos de entre 6 a 17 años de edad. Estos chicos fueron seleccionados y preparados con anticipación por profesionales destacados del futbol argentino.
“Recibimos hasta cinco llamados diarios para ver si éstas son pruebas para entrar al club. Algunos quieren al futuro Messi. Hasta un padre nos dijo que prefería mandarlo acá antes que a la universidad”, advierte Gonzalo Lamas, presidente de 86 Sports, quien trae el programa al país.
Sin embargo los padres que acompañen a sus hijos a la prueba solo podrán tener acceso a uno de los entrenamientos.”Queremos que loc chicos que participen se sientan libres, y si no, en vez de incorporar conceptos, absorben las presiones que les generan los padres”, concluye Lamas.
(149)