Relación muy, muy significativa: LA AMISTAD.
De todas las relaciones humanas importantes y elegidas desde el más puro sentimiento destacamos a la amistad, vínculo valorado, elección personal desde la más pura sensación acerca de que personas quiero tener muy próximas.
La psicología social define a la amistad como una relación que se establece voluntariamente entre dos personas, se comparte la compañía, la intimidad, la ayuda, el sentido de la lealtad.
Como proceso interpersonal tiene una evolución en la cual destacamos la formación de impresiones e inferencias acerca del otro. Intención de conocimiento mutuo, de encuentros regulares, incremento de intimidad, confidencias, complicidades, experiencias compartidas
Hay normas implícitas que regulan las relaciones de amistad: confianza recíproca, sensación de incondicionalidad, apoyo mutuo. La ruptura de una de estas normas puede provocar crisis e incluso el fin de una relación de amistad.
El mundo interior se abre en la mirada del amigo: temores, sueños, expectativas, secretos, sentimientos varios, la amistad adquiere distintas características de acuerdo a la edad, la formas, los modos de la amistad cambian, pero no cambia la esencia. Los logros del amigo nos agradan, nos gratifican, no nos producen sentimientos encontrados, lo apreciamos como es, con lo que posee y lo que le cuesta lograr o no llega, nos duele lo que le duele, y hay una necesidad sensata de acompañar, hablarle al amigo cuando necesita es como un ejercicio cercano de lo que nos diríamos a nosotros mismos en una situación a resolver.
Nunca separarnos, libertad o muerte.
Siempre, detenernos, sueño adolescente.
A los diecisiete vida es utopía.
Y les puedo asegurar que no tuve nunca más
Un amigo igual.
Victor Heredia, fragmento, Mientras Tanto.
Lic. en _Ciencias de la Educación Laura A. Toledo.
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