Mañana se realizará una audiencia pública sobre aumento de tarifas eléctricas en el AMBA
En la primera audiencia pública convocada por el ENRE, las empresas distribuidoras de energía, Edesur y Edenor, propondrán un aumento en la tarifa de distribución eléctrica para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) inferior al 150%. La medida forma parte del plan de ajuste fiscal del Gobierno, que busca recortar subsidios en energía y transporte.
En una iniciativa encaminada hacia la definición de futuros ajustes en las tarifas de energía eléctrica, el Gobierno llevará a cabo este viernes la primera audiencia pública del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE). Enfocada en la distribución eléctrica a cargo de Edesur y Edenor en el AMBA, se anticipa que las empresas solicitarán un incremento por debajo del 150% en este aspecto de la factura.
Asimismo, el lunes se realizará una consulta similar, pero esta vez centrada en el segmento de transporte eléctrico. Estos ajustes se enmarcan en el contexto de la eliminación progresiva de subsidios, iniciada en el gas y el transporte urbano.
La Resolución 2/2024, publicada a principios de mes en el Boletín Oficial, establece la realización de la audiencia con el propósito de “poner en conocimiento y escuchar opiniones respecto a las propuestas de las concesionarias del servicio público de distribución de energía eléctrica, EDENOR y EDESUR, tendientes a obtener una adecuación transitoria en la tarifa”. La presidencia del encuentro estará a cargo de Darío Arrué, interventor del ENRE.
En las presentaciones realizadas por Edesur y Edenor ante el ente regulador, se detalla que, excluyendo la revisión integral pendiente, Edenor requerirá ingresos por $521.000 millones y Edesur $330.000 millones para cubrir sus déficits respectivos. Fuentes del mercado sugieren que el aumento solicitado para el concepto de distribución será inferior al 150%.
Además, se plantea la posibilidad de establecer mecanismos de actualización mensual, vinculados al índice de precios mayoristas del Indec, siguiendo la misma línea que en el sector del gas. No obstante, cabe destacar que la decisión final recae en el Gobierno, ya que las audiencias no poseen carácter vinculante.
En este sentido, la Secretaría de Energía, a cargo de Eduardo Rodríguez Chirillo, sostiene la premisa de que las tarifas reflejen el costo del suministro, aunque ello implique incrementos significativos que impactarán en los hogares a partir de marzo. Paralelamente, se está diseñando un nuevo esquema de subsidios, con la introducción de una canasta básica energética, que entrará en vigencia en abril, en reemplazo del actual sistema de segmentación por ingresos.
Chirillo explicó que esta canasta se vinculará con los ingresos totales del grupo conviviente y se subsidiará a quienes superen un umbral específico, considerando diversas canastas por zona. A su vez, se contemplará el subsidio de zona fría en la Patagonia. Este cambio forma parte del plan de ajuste fiscal para lograr un superávit en 2024, con el objetivo de recortar subsidios en energía y transporte en un 0,7% del PBI este año, escalonándolos hasta su eliminación total en tres años.
Según estimaciones del Palacio de Hacienda, los subsidios a la energía representaron el 1,5% del PBI en 2023, disminuyendo desde el 2% en 2022 y el 2,3% en 2021. La intención es mantener esta senda de reducción, recordando que en 2019 equivalían al 1% del PBI al final del gobierno de Mauricio Macri y en 2020 aumentaron a 1,8% del PBI durante la gestión de Alberto Fernández.
Adicionalmente, el ENRE convocó a una segunda audiencia pública, programada para el lunes 29 de enero, con el objetivo de discutir propuestas de las empresas de transporte de energía eléctrica, como TRANSENER S.A., TRANSBA S.A., TRANSPA S.A., TRANSCO S.A., TRANSNEA S.A., TRANSNOA S.A., DISTROCUYO S.A. y el Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN). Aunque las audiencias no son vinculantes, constituyen un paso legal previo a cualquier aumento en las tarifas.
La consultora Economía y Energía proyecta incrementos en las tarifas eléctricas, considerando la eliminación del subsidio para los consumidores N1, el pago del costo pleno de abastecimiento para los N3, el 20% de ese costo para los N2, una recomposición del valor agregado de distribución y el impacto de la última devaluación.
Según estas proyecciones, las facturas promedio de electricidad para los consumidores N1 pasarán de $10.467 a $23.569, representando un aumento del 125%. Para los N3, el aumento sería del 337%, pasando de $5.518 a $23.569, mientras que para los N2, la suba sería del 129%, pasando de $3.970 a $9.082. En cuanto al gas, se espera un aumento del 204% para los N1, pasando de $4.558 a $13.867; del 336% para los N2, pasando de $3.197 a $13.867; y del 168% para los hogares N3 de ingresos más bajos, pasando de $1.862 a $4.865.
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